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Estudios biblicos sobre la Familia

 

Leccion.  Sobre el recasamiento Parte 2



El matrimonio como institución está sufriendo cambios que nunca fueron anticipados ni imaginados por nuestros antepasados.

Antes, el matrimonio era una fiesta de compromiso duradero, hoy es de compromiso pasajero.

Ahora hay "matrimonios" de hombres con hombres y mujeres con mujeres. Estos matrimonios son realizados con la bendición de iglesias "cristianas" históricas de "prestigio". ¿Qué es lo que los creyentes bíblicos tenemos que decir al respecto?

El divorcio es una realidad cotidiana en la mayoría de los matrimonios en los últimos tiempos.

Entre los incrédulos esto es casi normal y ya no implica ningún escándalo ni aflicción. No debe sorprendernos demasiado lo que ocurre con los inconversos porque no se puede esperar un rumbo distinto en aquellos que no conocen la palabra de Dios.

Empero, que el divorcio también sea una realidad cotidiana creciente entre los creyentes en Cristo, si que es triste y preocupante.


El recasamiento de personas divorciadas es normal en la vida de la gente de hoy. Siendo que el divorcio ha aumentado y está aumentando sobremanera en la vida de los hombres y las mujeres, el recasamiento o segundas o hasta terceras o cuartas o quintas o más nupcias; también están en crecimiento.

Este también es un asunto que los líderes de la iglesia de Cristo tenemos que afrontar al extender el reino de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

La pregunta que surge a causa de las realidad antes descrita es: ¿Cómo es que debemos tratar estos temas los que tenemos la responsabilidad de guiar al pueblo de Dios?

Quiero compartir lo que la Biblia dice sobre este  tema.
A continuación que dice la bíblia respecto a estos temas:


 

  1. La Biblia enseña claramente que el plan de Dios es el matrimonio duradero entre hombre y una mujer.

    Genesis 1:27-28 y Genesis 2:21-25 Revelan que el matrimonio según el plan de Dios siempre es entre un hombre y una mujer, nunca entre hombre y hombre, ni entre mujer y mujer; ni tampoco entre un hombre y varias mujeres, ni entre una mujer y varios hombres.

    Genesis 2:21-25 Revela que Dios estableció el matrimonio a fin de integrar al hombre y la mujer en una unidad de dos personas distintas pero complementarias.

    También, que es de esta manera que ellos quedaban listos para cumplir la misión de: multiplicarse en muchos más seres humanos, llenar la tierra de seres humanos y así sojuzgarla, y dominar finalmente sobre todos los seres del mar, el cielo y la tierra.

    Genesis 1:26-31 y Genesis 2:7-25 Revela que el hombre y la mujer son de igual valor porque ambos fueron hechos a imagen de Dios.

    También, que el hombre y la mujer tienen que cumplir roles y deberes distintos en el mundo y el hogar.

    Asimismo, que la razón de los distintos roles y deberes es la voluntad y el designio de Dios: al hombre le corresponde el liderazgo y a la mujer el ser ayuda idónea.

    Genesis 2:22-24 Revela que Dios es el que toma la iniciativa para darnos la pareja. Una vez que Dios nos ha dado nuestra pareja tenemos que unirnos y fusionarnos firmemente en ella. Se hace esto dejando nuestros padres en forma decente y desordenada. Con esta sola pareja dada por Dios hay que ser una sola carne por medio de la unión sexual, que es la expresión física de la unión de nuestras almas.

    Genesis 2:25 Revela que la relación de un hombre y una mujer dentro del matrimonio es una relación pura e inmaculada, transparente y placentera, íntima y confiable, duradera y no pasajera.

    El Señor Jesucristo, refiriéndose al matrimonio y basando su afirmación en este texto bíblico, dijo, en Mateo 19:4-6:

    "¿No habéis leído que el los hizo al principio, varón y hembra los hizo, y dijo: Por esto el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne? Así que no son ya más dos, sino una sola carne; POR TANTO, LO QUE DIOS JUNTO. NO LO SEPARE EL HOMBRE (Mayúsculas mías, para el énfasis en la durabilidad de la unión matrimonial desde la perspectiva divina).

    También, un poco más abajo y oponiéndose firmemente al divorcio, el Maestro de maestros, reiteró lo mismo, aunque con otras palabras, cuando dijo: ".....MAS EL PRINCIPIO NO FUE ASÍ" (Mateo 19:8).

    El Apóstol Pablo, reafirmó este mismo hecho de la durabilidad del matrimonio en 1 Corintios 7:10-11, con las siguientes palabras:

    "Pero a los que están unidos en matrimonio, mando, NO YO, SINO EL SEÑOR: QUE LA MUJER NO SE SEPARE DE SU MARIDO; ... Y QUE EL MARIDO NO ABANDONE A SU MUJER .

    En consecuencia de lo anterior, los pastores jamás debemos enseñar algo distinto a los que están bajo nuestro ministerio.

    Nuestros niños, nuestros jóvenes y nuestros adultos deben crecer con esta manera de pensar sobre el matrimonio.

    Debemos inculcar esta enseñanza tan firmemente en nuestra gente para que no se deje mover fácilmente de la misma por la presión de las leyes del gobierno, ni por la presión de la sociedad permisiva y libertina que les rodea.

    Como pastores y siervos de la palabra de Dios estamos llamados a izar la bandera del matrimonio duradero entre hombre y mujer porque es así como Dios ha diseñado el mismo.

  2. El divorcio y la Palabra.

    Deuteronomio 24:1-4 "Cuando alguno tomare mujer y se casare con ella, SI NO LE AGRADARE POR HABER HALLADO EN ELLA ALGUNA COSA INDECENTE, LE ESCRIBIRÁ CARTA DE DIvORCIO, y se la entregará en su mano, y la despedirá de su casa. Y salida de su casa, podrá ir y casarse con otro hombre. Pero si la aborreciere este último, y le escribiere carta de divorcio, y se la entregare en su mano, y la despidiere de su casa; o si hubiere muerto el postrer hombre que la tomó por mujer, no podrá su primer marido, que la despidió, volverla a tomar para que sea su mujer, después que fue envilecida; porque es abominación delante de Jehová, y no has de pervertir la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad".

    Mateo 5:31-32 "También fue dicho: Cualquiera que repudie a su mujer, dele carta de divorcio. Pero yo os digo que el que repudia su mujer, A NO SER POR CAUSA DE FORNICACIÓN, hace que ella adultere, y el que se casa con la repudiada comete adulterio".

    Mateo 19:3-6 "Entonces vinieron a él los fariseos tentándole y diciéndole: ¿Es licito al hombre repudiar a su mujer POR CUALQUIER CAUSA? Él respondiendo, les dijo: ¿No habéis leído que el que los hizo al principio, varón y hembra los hizo, y dijo: por esto dejará el hombre padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne; por tanto, lo que Dios junto, NO LO SEPARE EL HOMBRE". (Otra vez, mayúsculas mías, para el énfasis en el hecho de que el hombre por su maldad y pecaminosidad sí es capaz de separar lo que Dios juntó).

    Mateo 19:7-8 "Le dijeron: ¿Porqué, pues mando Moisés dar carta de divorcio, y repudiarla. Él les dijo: POR LA DUREZA DE VUESTRO CORAZÓN MOISÉS OS PERMITIÓ REPUDIAR A VUESTRAS MUJERES, MAS AL PRINCIPIO NO FUE ASÍ" (mayúsculas mías, para el énfasis en el hecho de que el hombre por su maldad y pecaminosidad es quien "obligó" que se dictase el permiso de divorcio). Ejemplo: El padre que "dejó" que su hijo se fuese de su casa (Lucas 15:11-12). También, lo que hizo Dios con la humanidad en Romanos 1:18-32.

    Mateo 19:9-10 "Y yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, SALVO POR CAUSA DE FORNICACIÓN, y se casa con otra, adultera; y el que se casa con la repudiada, adultera. Le dijeron sus discípulos: Si así es la condición del hombre con la mujer, NO CONVIENE CASARSE". (Las mayúsculas son mías y buscan mostrar como tanto el Antiguo Testamento como Jesús están de acuerdo en que sólo por la maldad del hombre es que el divorcio llegó a ser una realidad en el mundo en que vivimos).

     

  3. El Antiguo Testamento enseña claramente que Dios aborrece el repudio y a todo lo que está relacionado con este tipo de situación.

    Malaquias 2:14-16 "Más diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha atestiguado entre ti y la mujer de tu juventud, contra la cual has sido desleal, siendo ella tu compañera, y la mujer de tu pacto. ¿No hizo él uno, habiendo en él abundancia de espíritu? ¿Y porque uno? Porque buscaba una descendencia para Dios. Guardaos, pues, en vuestro espíritu y no seáis desleales para con la mujer de vuestra juventud. PORQUE JEHOVÁ DIOS DE ISRAEL HA DICHO QUE ÉL ABORRECE EL REPUDIO, y al que cubre de iniquidad su vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales".

    Levitico 21:7,14-15 "Con mujer ramera o infame no se casarán. NI CON MUJER REPUDIADA DE SU MARIDO, porque el sacerdote es santo a su Dios. ... No tomará viuda, NI REPUDIADA, ni infante ni ramera, sino tomará de su pueblo una virgen por mujer, para que no profane su descendencia en sus pueblos; porque yo Jehová soy el que lo santifico"

    Al igual que los sacerdotes del AT los creyentes de hoy estamos obligados a vivir en el alto estándar de Dios, no más bajo que eso. Por eso, ningún creyente debe olvidar este mandamiento y hecho ineludible: Dios aborrece el divorcio.

  4. Jesús enseñó que hay una sola causa lícita para el divorcio.

    Mateo 5:31-32 "También fue dicho: Cualquiera que repudia a su mujer, dele carta de divorcio. Pero yo os digo que el que repudia a su mujer, A NO SER POR CAUSA DE FORNICACIÓN, HACE QUE ELLA ADULTERE, Y EL QUE SE CASA CON LA REPUDIADA COMETE ADULTERIO.

    Mateo 19:9-10 "Y yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, SALVO POR CAUSA DE FORNICACIÓN, Y SE CASA CON OTRA, ADULTERA EL QUE SE CASA CON LA REPUDIADA ADULTERA. Le dijeron sus discípulos: si así es la condición del hombre con la mujer, NO CONVIENE CASARSE"

    Deuteronomio 24:1-4 "Cuando alguno tomare mujer y se casare con ella, SI NO LE AGRADARE POR HABER HALLADO EN ELLA ALGUNA COSA INDECENTE, LE ESCRIBIRÁ CARTA DE DIVORCIO, y se le entregará en su mano, y la despedirá de su casa. Y salida de su casa, podrá ir y casarse con otro hombre. Pero si la aborreciere este último, y le escribiere carta de divorcio, y se la entregare en su mano, y la despidiere de su casa; o si hubiere muerto el postrer hombre que la tomó por mujer, no podrá su primer marido, que la despidió volverla a tomar para que sea su mujer, después que fue envilecida; porque es abominación delante de Jehová, y no has de pervertir la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad".


    Jesús enseñó que el hombre que se divorcia de su esposa sin la causa lícita (fornicacion) y luego se casa con otra mujer, comete adulterio y lo mismo ocurre con su mujer si es que ella se casa otra vez.

    Mateo 5:31-32 "También fue dicho: Cualquiera que repudie a su mujer, dele carta de divorcio. Pero yo os digo que el que repudia a su mujer, a no ser por causa de fornicación, HACE QUE ELLA ADULTERE; Y EL QUE SE CASA CON LA REPUDIADA, COMETE ADULTERIO.

    Mateo 19:9-10 "Y yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación, Y SE CASA CON OTRA, ADULTERA; Y EL QUE SE CASA CON LA REPUDIADA, ADULTERA. Le dijeron sus discípulos: si así es la condición del hombre con la mujer, NO CONVIENE CASARSE"

    Lucas 16:18 "TODO EL QUE REPUDIA A SU MUJER, Y SE CASA CON OTRA, ADULTERA; Y EL QUE SE CASA CON LA REPUDIADA DEL MARIDO Y SE CASA CON OTRO, COMETE ADULTERIO".

    Marcos 10:10-12 "En casa volvieron los discípulos a preguntarle de lo mismo, y les dijo: CUALQUIERA QUE REPUDIE A SU MUJER Y SE CASA CON OTRA, COMETE ADULTERIO CONTRA ELLA; Y SI LA MUJER REPUDIA A SU MARIDO Y SE CASA CON OTRO, COMETE ADULTERIO".

    Antes de pasar a otro punto, quiero mencionar que aunque Jesús está respondiendo a la pregunta sobre el divorcio, su respuesta no intenta promover el divorcio, sino regularlo.

    La pregunta que inicia la discusión y la respuesta de Jesús fue: "¿Es lícito al hombre repudiar a su mujer como cualquier cosa? La respuesta de Jesús a esta interrogante fue: NO POR CUALQUIER COSA, SINO SÓLO POR UNA: LA FORNICACIÓN.

    Luego, al contrario de promover el divorcio, Jesús busca que se vuelva a lo dicho por Dios en Génesis 2:24, y quien mejor entendió el verdadero énfasis de Jesús, fue su apóstol a los gentiles, el apóstol Pablo.

    Leamos su declaración en 1 Corintios 7:10:

"Pero a los que están unidos en matrimonio, MANDO, no yo. SINO EL SEÑOR, QUE LA MUJER NO SE SEPARE DE SU MARIDO; y si se separa, quédese sin casar, o reconcíliese con su marido; y el marido no abandone a su mujer.

(En este pasaje Pablo reitera la enseñanza de Jesús y el mandato que él dio a sus seguidores que son casados... QUE NO SE SEPAREN. Además, insistió en que si la separación de todas maneras llega a ocurrir, LOS SEPARADOS DEBÍAN DE RECONCILIARSE O NO VOLVERSE A CASAR NUNCA MÁS).


Para culminar este comentario tengo que enfatizar el hecho de que para Pablo EL CREYENTE NUNCA TIENE LA INICIATIVA NI LA INSISTENCIA EN SEPARARSE DE SU CONYUGIE INCRÉDULO (A), AL CONTRARIO DE ESTO, EL CREYENTE SIEMPRE INTENTERÁ MANTENER A TODA COSTA LA UNIÓN CONYUGAL.

En esto el apóstol de los gentiles coincide con lo dicho por el Espíritu Santo por medio del apóstol Pedro en 1 Pedro 3:1:

"Asimismo vosotras mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; PARA QUE TAMBIÉN LOS QUE NO CREEN A LA PALABRA, SEAN GANADOS SIN PALABRA POR LA CONDUCTA DE SUS ESPOSAS.

  1. Lo que es claro sobre el recasamiento de los separados aún por causa lícita son restricciones concretas

                                                                                                La ley de Moisés en Deuteronomio 24:1-4 es clarísima al respecto.

El texto sagrado dice:

"Cuando alguno tomare mujer y se casare con ella, SI NO LE AGRADARE POR HABER HALLADO EN ELLA ALGUNA COSA INDECENTE, LE ESCRIBIRÁ CARTA DE DIVORCIO, y se la entregará en su mano, y la despedirá de su casa. Y salida de su casa podrá ir y casarse con otro hombre. Pero si la aborreciere este último, y le escribiere carta de divorcio y se la entregare en su mano, y la despidiere de su casa; o si hubiere muerto el postrer hombre que la tomó por mujer, NO PODRÁ SU PRIMER MARIDO, QUE LA DESPIDIÓ, VOLVERLA A TOMAR PARA QUE SEA SU MUJER, DESPUÉS QUE FUE ENVILECIDA; porque es abominación delante de Jehová, y no has de pervertir la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad".

Los que están casados y se separan sin que hubiera una causal lícita están llamados a reconciliarse entre sí o a no volver a casarse más.

1 Corintios 7:10-11 declara contundentemente:

"Pero a los que están unidos en matrimonio, Mando, no yo, SINO EL SEÑOR, que la mujer no se separe del marido; Y SI SE SEPARA, QUÉDESE SIN CASAR, O RECONCÍLIESE CON SU MARIDO; y el marido no abandone a su mujer.

Los que se separan sin una causal lícita no pueden casarse sin pecar ellos mismos ni sin hacer pecar a los que se casan con ellos.

Mateo 5:31-32 declara:

"También fue dicho: Cualquiera, de que repudie a su mujer, dele carta de divorcio. Pero yo os digo que el que repudia su mujer, a no ser por causa de fornicación, HACE QUE ELLA ADULTERE, Y EL QUE SE CASA CON LA REPUDIADA, COMETE ADULTERIO.

Mateo 19:9-10 afirma:

"Y yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación, Y SE CASA CON OTRA, ADULTERA; Y EL QUE SE CASA CON LA REPUDIADA, ADULTERA. Le dijeron sus discípulos, si así es la condición de hombre con la mujer, NO CONVIENE CASARSE"


Lucas 16:18 dice lo mismo:

"TODO EL QUE REPUDIA A SU MUJER, Y SE CASA CON OTRA, ADULTERA; Y El QUE SE CASA CON LA REPUDIADA DEL MARIDO, ADULTERA."

Marcos 10:10-12 dice:

"En casa volvieron los discípulos a preguntarle de lo mismo,* y les dijo cualquiera que repudie a su mujer y se casa con otra. COMETE ADULTERIO CONTRA ELLA; Y SI LA MUJER REPUDIA A SU MARIDO Y SE CASA CON OTRO COMETE ADULTERIO"

* (ESTO IMPLICA QUE LOS DISCÍPULOS QUERÍAN ESTAR SEGUROS, PERO MUY SEGUROS DE LO QUE JESÚS HABÍA DICHO. NOSOTROS, AL IGUAL QUE ELLOS, DEBEMOS ENTENDER BIEN LO AFIRMADO POR CRISTO, PARA NO TROPEZAR, PARA NO HACER QUE OTROS TROPIECEN, PERO, SOBRE TODO, PARA NO DESAGRADAR A DIOS).



Conclusión


 

  1. Un resumen de lo expuesto:

    La Biblia enseña claramente que el plan de Dios es el matrimonio duradero entre un hombre y una mujer.


    El antiguo testamento enseña claramente que Dios aborrece el repudio y a todo lo que está relacionado con este tipo de situación.

    Jesús enseñó que hay una sola causa lícita para el divorcio (la fornicacion).

    Jesús enseñó que el hombre que se divorcia de su esposa sin la causa lícita (fornicacion), y luego se casa con otra mujer, comete adulterio; y lo mismo ocurre con su mujer, si es que ella se casa otra vez.

     

  2. Consejo a tomar en cuenta en base a nuestra realidad:

    Las situaciones matrimoniales o conyugales irreversibles e irremediables no deben ser un obstáculo para ser cristianos fieles a Cristo. Hago esta afirmación porque esas mismas situaciones no fueron un obstáculo para nacer de nuevo y así entrar en el reino de Dios.

    Los pastores y líderes debemos tomar en cuenta este texto bíblico 1 Corintios 7:18-24 al tratar estos casos y animar (no desalentar ) a los que están viviendo en ese tipo de situacion. En ninguna manera hay que desecharlos, sino animarlos a que sean fieles al Señor y oren presentando a Dios su situacion.

  3. Unas observaciones Bíblicas claves:

    Nunca debemos perder la vista que el ideal de Dios es el matrimonio duradero: Los creyentes verdaderos nunca debemos bajar de este estándar.

    Pero, tampoco tenemos que desechar a los que están viviendo esta situacion.

    Lo que debemos hacerles es hablar la Palabra y orar por ellos hasta que Dios los salve y los disponga a vivir conforme a sus normas.

  4. Para Finalizar:

    Considero que debemos vivir Romanos 15:14 al tratar el matrimonio, el divorcio y el recasamiento.

    Ese texto dice:

    "Pero estoy seguro de vosotros, hermanos míos, de que vosotros mismos estáis llenos de bondad, llenos de todo conocimiento, de tal manera que podéis amonestaros los unos con los otros."

    Recordemos siempre que: "... el hijo del hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas" Lucas 9:56.

    Nosotros somos discípulos de Jesucristo y no debemos ir más allá que nuestro maestro; tampoco estamos aquí para hacer distinto de lo que él mismo ha hecho.

    Él no vino para desechar ni destruir (estamos viviendo el tiempo de su gracia y buena voluntad Lucas 4:16-21) las almas de los hombres, sino para Salvarlas.

    Estoy convencido de que si es que nosotros somos del mismo espíritu que él, haremos justamente lo que él hizo y esta haciendo hoy con las almas de los hombres: Salvándolas.

 

¡Que Dios nos dé sabiduría, compasión y amor al tratar con la gente que es traída por él a su iglesia en esta situacion.

 

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